“Somos conscientes de que mi vida está en juego”. Lylean Machado. De Negrx a Negrx

Pese a haber nacido y crecido en Madrid, la abogada Gemma Jones Ndjoli encontró su sitio en Guinea Ecuatorial, lugar al que llegó de adulta y desde donde está ejerciendo su profesión con tesón, ahínco y compromiso. Un compromiso que le ha llevado a posicionarse, como letrada y como ciudadana, a favor de los colectivos más desfavorecidos, ya sean las mujeres, las personas LGTBIAQ+ o los inmigrantes, pero también las víctimas de la explosiones que tuvieron lugar en la ciudad de Bata en Marzo de este año.

A lo largo de esta entrevista, Jones Ndjoli nos habla de ello y, además, denuncia sin ambages la fragilidad de pilares tan básicos para cualquier sociedad como son la sanidad o la educación. Lo anterior aboca a la población a una situación de inseguridad e ignorancia muy convenientes para el sistema.

Por su vasta experiencia, da la sensación de que ha tenido varias vidas, sin embargo, se trata de una joven que ha decidido exprimir la que tiene y, sobre todo, no callar ante las injusticias en un contexto en el que obrar así no resulta nada fácil y puede tener consecuencias.  

Estudiaste enfermería y Derecho, dos áreas de conocimiento muy alejadas, ¿qué te atraía de cada una de ellas?

Sí, es cierto soy Diplomada Universitaria en Enfermería por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y Licenciada en Derecho por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED). El nexo en común entre las mismas es lo que ambas carreras me permiten hacer: asistir y ayudar. Siempre me gusta recalcar que mi figura es asistencial. De la carrera de Enfermería, en su día, me enamoró todo, pero el ejercicio profesional lastró mis ganas. Entre eso y que siempre quise estudiar Derecho, actualmente, mi estado civil no es soltera, sino casada con la profesión, con la Abogacía. A día de hoy, lo que más me gusta del Derecho, es lo que me permite ayudar, ser yo y mediar como una interlocutora válida en la ecuación.

Esas ganas de ayudar, son las que nos han permitido hacernos un hueco que, sin duda alguna nos hemos ganado y nos corresponde por derecho propio, en el ecosistema de negocios de la República de Guinea Ecuatorial.

¿Dirías que tu madre, que también es enfermera, ha sido tu referente?

Sí, mi madre, una gran mujer ndowé, es uno de mis referentes. Lo digo con mucho orgullo, la verdad. Madre de familia numerosa, migrante y estudiante incansable. Ella es uno de los nexos de unión entre mi persona y la República de Guinea Ecuatorial. De ella he sacado mi fuerza de voluntad, mis ganas, el arrojo y el carácter. Siempre me dice que no me quede con las ganas, que el no ya lo tengo por delante y cuando hago una de las mías se “enfada”. Dice que soy el terremoto de su casa.  

Vamos ahora al Derecho, Gemma, te fuiste a Guinea Ecuatorial a trabajar como abogada cuando ni siquiera lo habías pisado, ¿Qué te llevó a tomar esa decisión?

Soy una mujer muy instintiva e intuitiva y lo que me llevó a tomar esa decisión es que siempre he tenido la sensación interior de que físicamente yo no estaba en el lugar que debía estar, así que cuando apareciste tú, y me comentaste que había una oferta de trabajo que quizás me podría interesar, pensé para mí misma¿y si este fuera el cambio que tanto he estado esperando?”. Así que decidí postularme sin más y, tras 7 años de ejercicio profesional como enfermera, superé el proceso de selección para ser consultora legal, renuncié a mi puesto de trabajo en el hospital y me aventuré a trabajar para una empresa local ecuatoguineana.

¿Y a qué te dedicas ahí exactamente?

Pues mira, primero de todo me veo en la obligación de hacer una breve recapitulación para que se entienda la respuesta: mi primera incursión en el país ecuatoguineano fue desde 2012 hasta 2014 y no me fue bien, Me fui y después decidí regresar por un proyecto en agosto de 2018. Ese proyecto no discurrió como yo esperaba y empecé a trabajar como profesional independiente hasta que, a finales de 2019, comencé a trabajar también para una empresa pública como Jefa del Departamento legal y Fiscal.

En diciembre de 2019, realice un viaje a Madrid para pasar las vacaciones de Navidad, con mi familia y mis amistades. Por aquel entonces, la empresa pública estaba al corriente del pago de los salarios y, haciendo gala de mi intuición, decidí empezar a comprar el mobiliario de mi despacho. Lo recuerdo perfectamente, mi madre me miraba con cara rara mientras yo embalaba la silla del despacho, hasta que se decidió a preguntarme: “¿Gemma, en Guinea no hay sillas?”, a lo que yo le contesté ”en Guinea sí hay sillas,  pero sé que no voy a volver a cobrar de la empresa pública. Estoy montando mi propio Despacho y he elegido esta silla porque desde aquí espero tomar grandes decisiones”. Acto seguido mi madre se giró y volvió a la cocina que era el lugar del cual había salido. Y así fue, pese a que nada ni nadie hacían presagiar lo que iba a suceder, la última paga que percibí de la empresa pública fue la extraordinaria de diciembre de 2019, en torno a febrero – marzo de 2020, surgió oficialmente la pandemia, y finalmente fui despedida en julio de 2020 –después de haber estado siete meses sin cobrar.

Al inicio de la pandemia, mi madre me llamó y me pidió que por favor regresará a España, yo le conteste que no, que no me iba a mover a ningún sitio, que si mi día había llegado, no iba a huir. Ahora te lo cuento tranquilamente, pero en su momento, fue un drama…

En aquel tiempo, la Covid – 19, aparentemente no había llegado a Guinea, sin embargo, se estaba cobrando vidas por centenas en Europa y otras latitudes, y mi postura ante mis familiares era vista como una “locura”, sobre todo, por la precariedad palpable del sistema sanitario público ecuatoguineano. Mi hermana, y apoyo incondicional, Astrid Jones, era la única que lo veía normal, le dijo a mis padresGuinea es su sitio, ella está ahí por algo, debe permanecer ahí”. Muchos guineanos abandonaron el país despavoridos ante el miedo y la psicosis de una pandemia tildada de “letal” por los medios de comunicación audiovisual. Honestamente, no les juzgo, les entiendo, nadie tenía ni idea de lo que iba a suceder en Guinea. En los medios de comunicación se les llamó “traidores”, hecho que me pareció y parece  totalmente injusto.

Así las cosas, yo seguía a lo mío y, formalmente y en medio del caos y de la incertidumbre, nació JONES & SACRISTÁN, Despacho de Abogados, impulsado por los “privilegios no escritos” de los que gozan las empresas públicas. El que estas puedan tomar la decisión unilateral de dejar de abonar los salarios y/o no pagar y/o pagar cuando quieran y/o no abonar la correspondiente liquidación salarial, con total impunidad, hizo que en el año 2020 muchos tuviéramos que agudizar el ingenio.

Me gustaría hacer un una breve pausa para indicar que hay que tener en cuenta que, en la República de Guinea Ecuatorial, no existen las prestaciones por desempleo, ni existe un fondo de garantía salarial ni nada por el estilo. Es decir, que si una empresa pública o privada decide prescindir de tu servicios y no pagarte, te vas a tu casa con una mano delante y otra detrás y ya depende de la voluntad individual de cada cual comenzar una ofensiva judicial o no, que pese a ser un procedimiento abreviado, tarda muchísimo debido a la congestión de los casos…

Actualmente, este es un problema endémico en la República de Guinea Ecuatorial, al que a nivel institucional no se le ha dado ningún tipo de respuesta, y ha surgido lo que nosotros llamamos una “economía familiar de subsistencia”, donde los familiares se apoyan como pueden, los unos a los otros, mediante microcréditos, etc… para ir tirando hacia adelante.

Humildemente, nosotros entendemos que las empresas públicas ecuatoguineanas deberían ser el máximo ejemplo de gobernabilidad y de respeto a la norma, pero muchas de ellas no lo son y se valen de su posición hegemónica en el ecosistema de negocios para hacer y deshacer abiertamente, con total impunidad. Al igual que entendemos que las mismas deberían de estar dirigidas por personas que cuenten con una historia de éxito reputacional en una organización de renombre a sus espaldas y una formación y experiencia adecuada. Pero, lamentablemente, el principio de “la meritocracia” no se estila a nivel institucional. Da igual que lo hagan bien o mal, son irresponsables frente a la ciudadanía, pero lo dramático del hecho, es que una gestión inadecuada de una empresa pública atenta a todas luces contra la economía de nuestra nación y contra la economía de los hogares domésticos.

Es un hecho que, lo mires por donde lo mires, genera estupor y resulta del todo desgarrador, duele mucho ver como se repite una y otra vez la misma situación y por ende ver, como se evaporan los recursos económicos de la nación.

Así que sí, retomando la cuestión, irónicamente podemos decir que JONES & SACRISTÁN, Despacho de Abogados, es fruto del sistema.

JONES & SACRISTÁN, no es más que una firma de Abogados local, con una doble vertiente, una vertiente económica que se caracteriza principalmente, por los servicios que prestamos en Derecho Tributario y Contabilidad Financiera, Consultoría de Negocios y Litigación, y una vertiente social que versa sobre la defensa de los Derechos Humanos, esto último es lo que más polémica y atención está generando.

Nosotros hemos nacido, entre otras cosas, para postularnos como interlocutores válidos acerca de las pretensiones de los colectivos sociales más vulnerables en la República de Guinea Ecuatorial.

¿Cómo es ejercer tu profesión en un país como Guinea?

El ejercicio de la profesión es difícil, es tremendamente difícil en Guinea. Primeramente, hay una clara y manifiesta tendencia a tomarse todo como algo personal, aderezada con las “advertencias propias y características” de los que se creen con ciertas ínfulas de poder en el lugar y, por otro lado, la expresión del pensamiento crítico y la denuncia no son entendidas como un ejercicio profesional proveniente de un razonamiento lógico tendente a evidenciar que hay algo que no está funcionando y que se desea mejorar en favor del beneficio de la colectividad social.

A resultas, nuestras iniciativas presuntamente nos condenan, e inmediatamente las mismas nos posicionan a favor y/o en contra del sistema. Nosotros somos juristas, todos lo demás calificativos sobran y son manifestaciones etéreas y carentes de sentido alguno. Además, hay muchas personas en Guinea, que no entienden ni la funcionalidad social de un/a Abogado/a, ni el impacto, ni la contribución que este o esta está destinado/a a propiciar por deontología y responsabilidad profesional en su entorno comunitario más inmediato, ser Abogado es un “modus vivendi”, que te obliga a abrir los ojos y a no mirar hacia otro lado, 24 horas al día, los 365 días del año, desde mi humilde entender.

Al Despacho nos llegan todo tipo de comentarios, respecto a nuestro trabajo y respecto a mi persona, no te puedes ni imaginar y la verdad es que nos hacen mucha gracia… Hay de todo, están los agradecidos y los “haters”, en cualquier caso, seguimos siendo fieles a nuestro ideario, el cual se encuentra en estricta consonancia con la promoción de medidas que garanticen un ecosistema de negocios sostenible, con la lucha por el respeto y la no violación de los Derechos Humanos y con la defensa a ultranza de los colectivos sociales más vulnerables en el territorio donde nos encontramos incardinados por medio de un elemento esencial, de nuestro elemento base: la denuncia.

Víveres llevados al Estadio de Banapa de la ciudad de Malabo, donde se encuentran los migrantes detenidos. Iniciativa promovida por el colectivo social, Somos +

¿Dirías que en el país la justicia es tal?  

Sí la hay pero con una morfología un tanto anodina y eso hace que esta se materialice de una manera bastante variopinta.

En Guinea, a la hora de impartir justicia, la tradición se opone a la incoación del proceso normorreglado frente al órgano jurisdiccional competente. La “justicia” se suele impartir principalmente en ambientes íntimos y comunitarios, determinadas conductas vejatorias y socialmente estigmatizadas no han de ser contadas, ni han de ser públicamente aireadas.

Esto hace que, de manera “tradicional” y dentro del núcleo más estrictamente familiar, se resarza tímidamente a la víctima y se castigue tímidamente al verdugo.

Esta manera “tradicional” de impartir justicia sucede, como te he indicado, en los entornos estrictamente familiares y en las dependencias policiales.

Y en los Juzgados, es algo aún más complicado…

¿Cuáles eran tu expectativas y qué fue lo que encontraste en Guinea en términos laborales pero también humanos?

 La verdad es que nunca tuve ninguna expectativa, quise vivir la experiencia. 

¿Qué ha provocado que hayas decidido quedarte en Malabo, a miles de kilómetros del lugar en el que creciste?

Soy feliz y estoy contenta, siento que estamos haciendo un trabajo diferente, y que estamos aportando nuestro granito de arena.

¿Y cómo has cambiado tú? ¿Quién eras al llegar y quién eres ahora?

He cambiado a todos los niveles, siempre me he considerado una persona bastante inmadura y determinados acontecimientos que han sucedido a mí alrededor me han hecho madurar a la fuerza, me han hecho tomar las riendas, no hay camino de vuelta.

De ser una persona algo más egoísta y egocéntrica, el trágico evento del 7 de marzo, el mayor desastre civil de la historia de la República de Guinea Ecuatorial, fue el evento que en mi vida prendió la mecha.  Me hizo deconstruirme para renacer con una nueva esencia y es el que me hizo reposicionarme en la escena, como una filántropa. 

Me he despojado de ciertas creencias limitantes, me he vuelto una estratega en alerta, una persona que escucha, he dejado de caminar sola, he conformado un equipo humano a mi alrededor, he aprendido a pedir ayuda, me he convertido en una lideresa de una organización, dispuesta a aceptar las luces y las sombras del escrutinio público y de la ecuación, dispuesta a defender el discurso que enarbolamos con cierta clase, vehemencia y pasión.

Ese es mi nuevo yo.

¿Y cuando regresas a España, sientes que ya no eres la misma o que es Madrid el que ha cambiado?

He cambiado yo, visito los mismos lugares, las mismas personas pero ha habido una transición, una lógica trasformación interior, o yo al menos lo siento así. Es algo difícil de explicar, hasta incluso un poco místico, ya no me domina el consumismo, tengo otras prioridades, me he vuelto una persona muy empática y muy sensible al dolor ajeno.

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Gemma Jones, Geren

Hablando de quién eres, sería importante charlar acerca de tu faceta como activista social por los derechos de las mujeres pero también de la comunidad LGTBIQ+, ¿Cuál es la situación de cada uno de esos colectivos en la actualidad y desde qué plataformas o qué acciones estás llevando a cabo tú para contribuir a su mejora?

Empecé en el año 2018 a colaborar tímidamente con la plataforma Mujer Ideal, que es una iniciativa impulsada por Lucas Escalada, y en ese mismo año también empecé a colaborar con la comunidad LGTBIQ+ en Guinea.

Las mujeres aquí están guerreando, reclamando sus espacios y sus cuotas de poder, de hecho este año tuvo lugar un evento histórico: la celebración de la primera Asamblea Nacional de Mujeres, de la República de Guinea Ecuatorial, una iniciativa promovida por Mujer Ideal, que fue todo un éxito y en la que se expusieron y evidenciaron las diferentes problemáticas transversales que afectan a la mujer en Guinea. Esta es una iniciativa pero hay otras muchas, la sociedad civil está trabajando como puede, pese a las dificultades inherentes del contexto.

En cuanto a la comunidad LGTBIQ+, su situación como colectivo social vulnerable, es más complicada. La sociedad civil no está sensibilizada para entender ni aceptar la diversidad sexo afectiva. La tradición juega un papel esencial, y tradicionalmente, no está bien visto… En general, se sigue pensado que su existencia se debe a la “brujería” o se asocia a otras creencias. En definitiva, es  un colectivo que no cuenta con ningún tipo de respaldo institucional local. Pero, dentro de sus posibilidades es un colectivo que también está guerreando por su integración social.

Para ambos colectivos, siempre estamos disponibles, y ponemos a disposición de los mismos nuestra pericia profesional para ayudar de manera totalmente desinteresada.

Mucha gente te recordará por un  texto que escribiste en RRSS sobre SEGESA, ¿Qué decías?

Nosotros hemos denunciado la actuación de los inspectores de SEGESA, otros de sus empleados y a SEGESA, ante el Juzgado de Instrucción nº2 de la ciudad de Malabo, y lamentablemente tal denuncia no fue admitida a trámite mediante una resolución interlocutoria, una providencia, no motivada, que dice lo siguiente:

 “entiendo que el procedimiento del caso debería ser ordinario interponiendo una querella criminal para mejor esclarecimiento de los hechos”.

Hecho que no es para nada normal… No se tomaron, ni siquiera, la molestia de dictar un Auto motivado.

Fíjate la lógica que impera en el país,  en vez de imponerse lo previsto en nuestra vigente Ley de Enjuiciamiento Criminal, se impone a la misma, una creencia personal  del Juez titular del Juzgado de Instrucción nº2, de Malabo, para nada fundamentada en base a Derecho y  la denuncia deja de ser de manera inmediata y automática, una vía ordinaria para incoar un proceso penal, de la cual el ciudadano no puede gozar

Y nosotros decimos alto y claro, que este hecho es del todo escandaloso. Es un escándalo.Se mire por donde se mire….

Esa providencia, no es más que una prueba clara y evidente, de que el contexto es sintomático.

Hemos denunciado un problema de orden público que, a nivel institucional, no interesa porque es SEGESA, que es la empresa pública eléctrica nacional, una empresa que ocupa un lugar hegemónico en el ecosistema de negocios de la República de Guinea Ecuatorial.

Tras denunciar públicamente este en hecho en redes sociales, a la hora ya nos habían cortado el suministro eléctrico del despacho, pese a estar al corriente del  pago de nuestras facturas.

A nuestro entender, los inspectores de SEGESA, se valen y se parapetan de su condición privilegiada consistente en estar actuando en nombre y representación de una empresa pública para literalmente «arrancar” los cables y “automáticos” de los suscriptores por la mera contracción de una deuda. Nosotros, entendemos que su actuación no es conforme a derecho y que tales bienes son bienes privativos contra cuya titularidad no se puede atentar así, porque sí, sin que medie un mandato judicial. Entendemos que la empresa eléctrica se debería de ceñir al mero corte del suministro eléctrico sin más, y no atentar en ningún caso contra la propiedad privada de la ciudadanía.

La libertad e impunidad con la que actúan los inspectores de SEGESA, da pie a que estos concurran en las viviendas bajo la advertencia de “o pagas o te arranco el ‘automático’”, y en los entornos menos pudientes, donde se encuentran familias numerosas, los escenarios que se llegan a generar se tornan más que “violentos”. Queremos que se dejen de producir estos escenarios, pero no interesa…

El caso no interesa y estamos sufriendo dilaciones judiciales totalmente arbitrarias. Como te dije antes, el tema de la justicia en los Juzgados, es tremendamente complicado.

  ¿Qué consecuencias está teniendo para ti pronunciarte sobre estos asuntos?

El Despacho ha ganado mucha visibilidad a todos los niveles, especialmente a nivel internacional y profesional. El apoyo desde múltiples latitudes ha sido el lado bueno de la contrapartida. Nos han contactado desde múltiples regiones, diferentes personas físicas, organizaciones… incluso han contactado  a mis familiares más inmediatos y, sin querer, hemos generado un debate aparte, “¿qué es JONES & SACRISTÁN? y ¿Quién es Gemma Jones?”. Lo menos positivo es que mi figura y mi integridad física han estado y están actualmente en una posición muy controvertida y comprometida.

Nosotros no somos para nada ingenuos, hace algún tiempo en el despacho, diseñamos e implementamos un protocolo de actuación rápida a activar en caso de que algún día tuviera lugar una más que probable detención contra mi persona, así como también adoptamos diferentes mecanismos tendentes a salvaguardar y proteger mi integridad física.

De hecho, recientemente, el Observatorio Internacional de la Abogacía, publicó una alerta internacional de abogada en riesgo. Somos conscientes de que mi vida está en juego. Mi paz mental se basa en ser consciente del entorno donde vivo cada día y de los peligros inherentes e inminentes que me rodean por la profesión a la que me dedico y por las cuestiones que denunciamos. Es lo que hay. A veces resulta algo tremendamente agotador…

Recientemente, estuviste retenida en la Gendarmería general en Malabo, ¿Qué pasó? ¿Cómo te sentiste en esos momentos?

Sí, es correcto. Sucedió el pasado 15 de septiembre. No estaba nada sorprendida, de hecho, el día anterior me despedí de mi equipo y les dije “estoy emocionalmente preparada para ser detenida en cualquier momento”. Me miraron con cara rara, pero…dicho y hecho: En torno a las 10 horas del día siguiente, ya tenía a 3 policías de la Brigada Judicial instándome a acompañarles a dependencias policiales.

En ese momento, sentí que debía de cumplir con las exigencias del guion, mantener la calma, no mostrar resistencia y acompañarles.

Ya en la Gendarmería Nacional, me informaron de que el motivo de mi traslado hasta ahí se debía a la investigación de la filtración en redes sociales de un examen de la oposición convocada por el Ministerio de la Función Pública y Reforma Administrativa. Ese modelo de examen lo tenía yo, al igual que también lo tenía medio Guinea Ecuatorial. Estaba circulando por los grupos de WhatsApp, y, en aquel momento, ni siquiera sabía que ese examen era el verdadero, para mí era un modelo de examen, sin más.

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Providencia de inadmisión a trámite de la denuncia interpuesta por JONES & SACRISTÁN, contra SEGESA y alguno de sus empleados.

¿Crees que, en realidad, la retención está relacionada con tu actividad social?

Honestamente, sí. Antes, durante y tras las más de tres horas que estuve retenida, pasaron cosas que personalmente a mí no me hicieron ni pizca de gracia y que, a día de hoy, me hacen estar en alerta máxima, aunque como no podía ser de otro modo y pese a lo sucedido, dimos una versión “amable” de los hechos acontecidos mediante la emisión de un comunicado. Pero hemos tomado nota.

Ese día, era una jornada tremendamente especial. Recuerdo que, por la mañana, yo había posteado en redes sociales que “era verso suelto”. Tenía ganas de hablar, aunque fuera con los filtros propios que se han de utilizar en un lugar como la República de Guinea Ecuatorial. Por su parte, la Embajada de EEUU en Malabo había organizado un debate virtual en conmemoración del día internacional de la Democracia bajo el título “Democracia y Desarrollo”, integrado por cinco panelistas, yo era una de ellas. Era una fantasía, había parapeto y yo estaba lista para abordar y poner en tela de juicio la operatividad funcional de  las garantías que concurren en la nación ecuatoguineana para garantizar el normofuncionamiento de un Estado Democrático de Derecho. Ese día… era el día, el gran día, nuestro día.

Pero, lamentablemente me dejaron irme a casa, bajo la siguiente premisa: “usted puede irse a su oficina y que sepa que podemos volver a llamarla en cualquier momento, para que comparezca a lo largo del día”.

Pese a que era buenamente por todos conocido que yo no tenía absolutamente nada que ver con la filtración del examen, percibí que se estaba generando un ambiente claramente intimidatorio en torno a mi persona y, en ese preciso instante, entendí que yo no estaba en posición de negociar nada y que las órdenes venían dadas, según ellos desde “arriba”.

Me pusieron en libertad por la presión e intervención de terceros, las llamadas a la Gendarmería fueron incesantes.

Así que una vez puesta en libertad, me senté con mi equipo de comunicación y les dije “esto es lo que hay” y entre todos decidimos pedir disculpas a la organización del debate y no comparecer. El ambiente estaba muy tenso y enrarecido, el flujo de información era constante.

A título personal, pienso que es normal que estas cosas sucedan, es más suceden todos los días. En mayor o menor medida, el funcionamiento del sistema lo fomenta. Cuando entiendes que hay un reparto a todas luces desigual de los recursos económicos del país, cabe recordar que la República de Guinea Ecuatorial, es uno de los mayores países productores de  petróleo en África, cuando llevas meses sin cobrar pese a estar trabajando para una empresa pública y no hay una reacción institucional certera, cuando estás pasando hambre, cuando llevas a tu niño al hospital público y te dicen que no lo pueden tratar de leucemia porque carecen de recursos y fallece, cuando tu madre está agonizando en casa porque necesita un procedimiento médico que no se hace en el país, cuando un largo etc… , cada uno mercadea con lo que puede o con lo que le dejan, de tal manera que un “peón” se vuelve vital en la escena, de tal manera que cualquier “peón” en cualquier momento puede salir a la palestra, de tal manera, que el “peón”, torpedea y eclipsa fruto de la frustración manifiesta una iniciativa institucional cualquiera, que a priori parecía “buena”. Es lo que nosotros acuñamos como “auto-justicia social económica redistributiva”, cada uno está intentando disfrutar del producto interior bruto del país, a su manera. Cada uno está siendo Robin Hood, a su manera, y distribuye en familia lo que en la calle genera.

Pero hay que tener muchísimo cuidado en este escenario, porque cuando se hace creer a  alguien que nada tiene, este también cree que nada tiene que perder…

Así que todos los “incidentes” o “accidentes” que han sucedido, que están sucediendo o que vayan a suceder en la República de Guinea Ecuatorial, a mi modo de ver, no deben de ser analizados bajo ningún concepto como, “casos aislados”, sino que los mismos se corresponden con una concatenación de hechos que están aconteciendo dentro de un “contexto sintomático”.

¿El “incidente” ha provocado que te plantees abandonar Guinea o que vivas con miedo?

No, jamás, ni por un mini diminuto  segundo me plantee dejar la República de Guinea Ecuatorial, estoy muy contenta, la retención para mi es una anécdota. La “erótica” del miedo ha hecho mella, pero hemos decidido seguir, el incidente sirvió para que recalculemos ruta, y adoptemos y reforcemos nuestros protocolos internos y nuestras alianzas estratégicas con entidades afines a nuestra actividad. Nos sentimos acompañados, respaldados y agradecidos.

Estamos muy tranquilos la verdad, la línea argumental de nuestro trabajo y de nuestro discurso va a seguir igual. Somos “germen de cambio” y enarbolamos la bandera de un discurso reivindicativo basado en defender a ultranza los derechos y libertades fundamentales de la ciudadanía residente en la República de Guinea Ecuatorial. Nuestro discurso pretende instar al dialogo, a la más profunda reflexión y a la autocrítica institucional. Vamos a escribir más artículos de divulgación, vamos a seguir denunciado, exponiendo y evidenciando.

En definitiva, vamos a seguir trabajando.

¿Por qué te quedas? Guinea no es un país fácil…

Porque me encanta y amo la República de Guinea Ecuatorial. Particularmente, he tenido una relación de amor – odio intermitente con el país, pero ahora estamos bien, hemos hecho las paces, nos entendemos.

Aún con todo el ruido y el interés mediático  que tengo a mi alrededor, soy feliz, siento que estoy saldando una deuda, siento que estoy sanando y limpiando mi linaje y siento que estoy ayudando a mi pueblo, al pueblo  ecuatoguineano. Para nosotros esto último es muy importante, lo  más importante.

Y además acabamos de empezar, no tendría sentido renunciar.

Hablemos ahora de actualidad, están llegando noticias desde Guinea en las que se habla de persecución por parte de las fuerzas del Estado a personas migrantes en situación irregular , ¿Qué está sucediendo?

Te voy a hablar desde nuestra experiencia personal, sin aderezos sensacionalistas. Hará como algo más de dos semanas, creo que era un lunes por la mañana, empezamos a recibir varias llamadas: “Jones, están deteniendo a todos los migrantes, con o sin papeles en regla y los están llevando al Estadio de Banapa en Malabo”. Al principio, estábamos muy contrariados y comenzamos a investigar. Y, efectivamente, era así. Obviamente no estaban deteniendo a todos, pero sí se estaban llevando a cabo redadas policiales. Te cuento un caso, por ejemplo: ciudad de Malabo, nacional español, con visado turístico en regla, le detienen y le llevan al Estadio de Banapa. Estuvo retenido durante doce (12) horas, tras dejarle en libertad se negaron a devolverle su pasaporte. Hubo que solicitar intervención consular  urgente para que se lo devolvieran. Sentimos una gran impotencia, y como este caso, otros tantos de análogas o similares características. No es un funcionamiento normal de un servicio público…

Todos, estamos de acuerdo en que todo país tiene una política pública migratoria a implementar, ese no es el problema que se está tratando aquí, el problema es que las órdenes se dictan desde arriba y se implementan desde abajo, “de aquella manera”, y otra vez vuelve a surgir la “auto-justicia social económica redistributiva” y el “peón” entra en escena y hace de las suyas y aprovecha la situación. Se genera un escenario propicio donde las buenas manera brillan por su ausencia, donde existe la posibilidad de rentabilizar la encomienda y donde la no violencia no es el principio que rige la regla.

Todo ello aderezado con una crisis de valores y una falta de formación acuciante, que es la que exhiben aquellos que se suponen que deben de velar por ayudar a la ciudadanía y poner calma en las calles, generó un clima de revuelta e insatisfacción perfecta.

Personalmente, no tengo ningún tipo de nexo en común con los que mandan en el país, no les conozco, pero si les conociera me gustaría instarles a reflexionar acerca de cuánta responsabilidad tienen ellos en toda esta situación como parte del problema y como parte de la solución y sobre su responsabilidad acerca de cómo ha quedado retratado a nivel internacional el país, en los diferentes medios de comunicación. Es algo muy triste, que nos afecta a todos…

Cuando uno falla en las formas, automáticamente pierde la razón.

Y es lo que le ha pasado a Guinea. No hay más. Fruto de tales actuaciones, los migrantes en su gran mayoría se escondieron y cerraron sus negocios, pese a tener muchos de ellos la documentación en regla, por las maneras impropias de los policías, en aquel entonces era devastador caminar por las calles de Malabo, los migrantes han pasado muchísimo miedo…. La situación se fue totalmente de las manos…

De tal modo, que había inversores potenciales que estaban haciendo sus diligencias debidas para implantarse en Guinea Ecuatorial, que nos han contactado para preguntarnos acerca de este tema, y que nos han dicho que lamentándolo mucho, no se van  a establecer en Guinea Ecuatorial porque entienden que no es un lugar seguro. Y así es como se frustran las posibilidades de generar nuevos puestos de trabajo y de atraer a potenciales inversionistas en Guinea Ecuatorial. Las consecuencias internacionales de este incidente han sido gravísimas…

Yo estoy segura de que los dirigentes del país, no querían que se detuviese a personas con la documentación en regla, pero ha sucedido y hay que asumirlo, y también hay que asumir que los policías en Guinea necesitan formación, se tiene que invertir mucho en educación, educación en valores que edulcoren sus formas, educación para que sepan hacer bien su trabajo, educación para que sepan cuando detener a alguien y cuando no, y educación para respetar los derechos y libertades fundamentales de la ciudadanía.

Del mismo modo que se necesita que desde arriba les impongan límites claros y concisos a los policías, que no dejen lugar a la especulación sobre lo que creen que pueden hacer y lo que no, urgentemente.

Y también hay que asumir que si hasta la fecha muchas empresas como Guinea Limpia u otras, contrataron a personal extranjero en detrimento del nacional es porque a nivel institucional se permitió, y se miró hacia otro lado. ¿Dónde han estado todo este tiempo instituciones como el Ministerio de Trabajo, INSESO y Hacienda?.  No se habla, no se explica, no se entiende, porque no interesa…

Flyer del debate ‘Democracia y Desarrollo’

¿Qué consecuencia está teniendo para esas personas? ¿ y para lxs propixs guineanxs ?

Ahora han concedido un periodo de gracia, de tres (3) meses a los migrantes para regularizar su situación, y según me cuentan todavía quedan a día de hoy, alrededor de cuarenta (40) migrantes en el Estadio de Banapa.

Y por otro lado, hay otros muchos que no se atreven a denunciar, pero hay comerciantes que presuntamente dicen haber sufrido hostigamiento, maltrato y saqueos en sus comercios.

Respecto a los guineanos, me siento muy orgullosa de mi pueblo, pese a que hay algunos que han exhibido un discurso un tanto cuestionable, basado en la comparación, bajo el argumento “de en otros países también se hace”, aquellos representan la minoría, a mí personalmente no me consta, que en algún otro país y en medio de una pandemia, se detengan y aglutinen a migrantes con y sin la documentación en regla…

Merece la pena destacar, que la mayor parte de la sociedad civil ecuatoguineana, se ha hecho eco de un discurso solidario y empático e incluso se han llevado a cabo bonitas campañas solidarias en redes sociales, como muestra de apoyo. En concreto, Somos +, un colectivo civil ecuatoguineano,  ha estado llevando ollas de comida, agua y enseres de primera necesidad a título gratuito al Estadio de Banapa, para los migrantes. Es una labor del todo encomiable.

Tú te has ofrecido para asistirles legalmente ,  ¿has podido desarrollar tu labor ? ¿Y qué has encontrado?

JONES & SACRISTÁN, emitió un comunicado, donde mostrábamos nuestra más profunda solidaridad y empatía con los migrantes y, como no podía ser de otro modo, habilitamos un servicio de asistencia jurídica gratuita para ellos.

Queremos ser parte de la solución, parte del progreso. Estamos todos en un mismo barco y, por ende, estamos todos condenados a entendernos.

Fuimos al Estadio de Banapa, a testar cómo podíamos ayudar. Nosotros desde siempre hemos estado muy sensibilizados con la situación del migrante en la República de Guinea Ecuatorial y en el barrio soy conocida como la Abogada y siempre vienen, me llaman o me paran por la calle, nos preguntan… Para nosotros es normal ayudarles de manera totalmente desinteresada. Son del todo elegibles a obtener asistencia jurídica gratuita de JONES & SACRISTÁN, por derecho propio, porque conforman un colectivo social muy vulnerable y a los hechos nos remitimos.

Son pocos los que se han acercado, pero los que lo han hecho están contentos y se sienten muy agradecidos por la asesoría legal brindada.

Y dado que vas a seguir ahí, ¿Cuáles son tus planes de futuro confesables en el ámbito laboral y personal?

A nivel personal, mi entorno está blindado, puede sonar algo exagerado pero es lo que es, por razones obvias. No me dejo ver tanto como antes y hay planes, muchos, pero no confesables.

En cuanto al ámbito laboral y social, estamos trabajando en varias campañas de denuncia y, aprovechando el altavoz que nos has brindado, te vamos a adelantar algunas de ellas: queremos denunciar el excesivo precio de las pruebas PCR en Guinea Ecuatorial. A nivel institucional, reclamamos que se tenga más piel, tacto y empatía con el “bolsillo de los demás”, todos estamos sufriendo las consecuencias de la pandemia.

Te doy un ejemplo, una PCR para un guineano que quiera trasladarse al exterior cuesta 50.000 Ffca, al cambio son 75 Euros y para los extranjeros 110.000 Fcfa, al cambio 165 Euros. Es todo tan excesivo… Pero si un guineano se quiere trasladar al continente la PCR cuesta 5.000 Fcfa, es decir, 7 Euros y 50 céntimos.

Consideramos que la administración pública debería de ser un ejemplo edificante, ¿Cómo “el peón” no va a mercadear con lo que pueda, si a nivel institucional abiertamente, también se hace?, ¿por qué las PCR son tan caras en función de destino?. No se entiende y no hay una razón lógica para ello, ya que todas las pruebas se hacen en el mismo laboratorio, con los mismos materiales,165 Euros, es una barbaridad de dinero, aquí y en cualquier país de Europa.

Sinceramente, no hemos visto cosa igual. Esta diferencia de precio, atenta seriamente contra el derecho fundamental de la igualdad consagrado en el art. 13 de nuestra Ley Fundamental, esos precios son del todo discriminatorios…

Y eso, no es lo más grave, sino que nos consta que el personal del Laboratorio de Baney, lleva meses sin cobrar, pese a la ingentes cifras de dinero que se están embolsando en concepto de PCR que cuestan un dineral. Desconocemos dónde va el dinero de las carísimas PCR y tampoco justifican, en modo alguno, el impago de los salarios a los empleados….

Para nosotros es un hecho altamente bochornoso y aterrador. Una vergüenza y  nadie hace absolutamente nada. Estas cosas, obviamente, no se publican en los medios. Aquí solo hay que hablar del presunto perjuicio que originan los migrantes contra la nación, nótese mi ironía. De lo que hace el ecuatoguineano poco se habla …

Por otro lado y respecto al sistema sanitario, deseamos trabajar para evidenciar, que a nivel institucional, es necesario que se mejoren las prestaciones sanitarias y que se haga autocrítica a nivel interno de por qué en las instituciones públicas no se realizan según qué determinados procedimientos. No todo puede oscilar en torno a la idea de que la gente muere por brujería, el cáncer, existe y como esta, hay otras tantas patologías que a día de hoy no pueden ser tratadas en el país, por falta de especialistas y/o por falta de medios. Eso no puede ser …

Y para terminar, y cerrar la entrevista queremos denunciar la precariedad del sistema educativo ecuatoguineano, es muy fácil decir que se tiene que contratar a mano de obra local, pero la gran mayoría no están preparados, aunque puedan acreditar estudios reglados. 

Te cuento, el problema es que la formación base de la mayoría de los ecuatoguineanos no es nada buena, porque en el país han proliferado y abundan toda clase de centros académicos cuyos estándares educativos de calidad y profesorado están por debajo del mínimo aceptable en cualquier parte, menos en Guinea. Aquí todo vale.

Entonces, los estudiantes, cumplen 18 años,  se forman en Rusia, China, América Latina, África y por ahí, con sus famosas becas,  regresan al país después de haber estado una media de 6-7 años fuera, aparentemente estudiando, en instituciones privadas, que esa es otra… Pero, en la mayoría de los casos, lo que han estudiado no es extrapolable al país y buena parte de los becados regresan con las mismas carencias base de redacción y ortografía, porque estudiaron en otro idioma. Es difícil, vienen aquí, les pides que te redacten una simple carta en español y eso les suena a ciencia ficción.

En materia de educación la República de Guinea Ecuatorial ha sufrido una involución con todas las letras, sin precedentes, y a nivel institucional se deben de hacer responsables. Es una debacle generacional, de generaciones y generaciones lastradas …

Nosotros hemos llevado a cabo frustrantes procesos de selección en los que finalmente no hemos contratado a nadie porque muchos de los candidatos recién egresados de la Universidad Nacional de Guinea Ecuatorial, en Derecho, o no pueden hablar correctamente español o no pueden escribir correctamente español o no saben acentuar las palabras o los  hay que no pueden ni leer medio bien, o bien que si saben leer pero que no asimilan lo que leen, y también tienes a aquellos que tienen serias dificultades básicas con los números, con la lógica y con el razonamiento. Es del todo descorazonador… se mire por donde se mire.

Te estoy hablando de chavales y chavalas de más de 20 años para arriba…

Es por ello que instamos a que se adopte una acción urgente y certera a nivel institucional, se ha de invertir muchísimo dinero en educación, educación y más educación. Ya se ha invertido lo suficiente en infraestructuras. La educación es la base de cualquier nación.

Por último agradecerte, este espacio, este escaparate que nos has brindado, es una entrevista que ningún medio local me hubiera publicado. La verdad es que pensé que tenía menos que decir, pero he dicho bastante.

Mucha suerte en todo, Gemma.

De Negrx A Negrx: Lylean Machado

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