El dictador guineoecuatoriana está desde ayer en Kampala. A los motivos habituales de los viajes de Obiang (busqueda de oportunidades de negocio para él y su familia, confraternización con otros dictadores, cobro de dietas…) se suma ahora su interes para optar a la Presidencia de la Comisión de la UA, que se ha convertido en uno de los objetivos centrales de la diplomacia guineoecuatoriana.
El despacho de la Agencia Reuters que sigue y la cronica publicada por el diario El Mundo, proporcionan un resumen de las condiciones en las que se ha celebrado la reelección de Museveni y de la situación política actual de Uganda. Obiang está entre los suyos.
KAMPALA, 12 (Reuters/EP)
Las autoridades de Uganda han bloqueado este jueves diversas redes sociales, incluidas Twitter, Facebook y Whatsapp, con motivo de la toma de posesión del presidente Yoweri Museveni, cuya reelección ha provocado manifestaciones en la capital del país y que ya ha jurado su cargo.
Museveni, de 71 años, ganó las elecciones en febrero con un 60 por ciento de los votos a favor, lo que le ha permitido acceder a otra legislatura, que se suma a los 30 años que lleva en el poder. Los partidos opositores, por su parte, han denunciado irregularidades y se han producido manifestaciones en diferentes puntos de Kampala, donde los enfrentamientos con la Policía se han saldado con la detención de decenas de manifestantes.
Godfrey Mutabazi, director ejecutivo de la regulación de telecomunicaciones, ha indicado que las agencias de seguridad han pedido el cierre temporal de las redes sociales como «medida para limitar la posibilidad de que se produzca un atentado ante la llegada de diferentes mandatarios».
En los días previos las autoridades han desplegado en las calles de Kampala más patrullas de seguridad, lo que supone una mayor presencia militar y policial. El bloqueo de las redes sociales durante la votación y después de que ésta finalizara ha sido criticado por Estados Unidos y diversos grupos de defensa de los Derechos Humanos, quienes han destacado que esta acción ha socavado la integridad del proceso.
Los observadores internacionales de la Unión Europea han manifestado que los comicios se han producido en una atmósfera de carácter intimidatorio en un contexto político de falta de independencia y transparencia por parte del órgano electoral. La Policía ugandesa ha establecido que las elecciones se han producido de forma libre y justa, y niega que se haya restringido la libertad de expresión. El Gobierno, además, ha prohibido a las televisiones o radios cubrir las manifestaciones.
La oposición a Museveni es mayor en grupos jóvenes que viven en áreas urbanas, donde la frustración ha aumentado ante el incremento el desempleo, el repunte de la corrupción y la disminución de los servicios públicos.
Museveni ha sido acreditado de restablecer el orden tras años de Gobierno caótico con su llegada al poder en 1986. La economía ha crecido, pero los expertos sostienen que el presidente ha fracasado en el intento de cubrir las necesidades de la población, que siguen aumentando. Las voces opositoras también se quejan de la falta de voluntad política para acabar con la corrupción y de la represión contra aquellos que no sean adeptos al Gobierno.
El diario El Mundo dice: «El conflicto entre el presidente Yoweri Museveni y la oposición encabezada por Kizza Besigye ha entrado este miércoles en una nueva etapa con la prohibición el régimen ugandés del viajar a este último rumbo a Kampala, capital de Uganda.
Pese a existir todavía mucha confusión sobre el asunto, parece ser que Besigye se disponía a abordar un vuelo de Kenya Airways esta mañana en el aeropuerto internacional de Nairobi hacia Kampala, un día antes de que el presidente Museveni –en el poder desde 1986– tome posesión del cargo que dará inicio a su cuarto mandato.
La compañía aérea habría informado, según la BBC, de que el vuelo no estaría autorizado a aterrizar en suelo ugandés en caso de que Besgiye formara parte del pasaje, si bien el Gobierno de Kampala no habría confirmado tal extremo.
Tratamiento médico en Nairobi
Besigye se encuentra en Nairobi desde hace dos semanas recibiendo tratamiento médico después de que perdiera temporalmente la vista a causa del gas pimienta tras manifestarse el pasado 28 de abril en Kampala contra la subida del precio de los alimentos básicos y los carburantes. A lo largo del mes de abril, la oposición ha organizado varias protestas pacíficas bajo el lema ‘Andar al trabajo’, unas marchas que han concluido con el arresto de Besigye hasta en cuatro ocasiones. En la última marcha, el opositor sufrió los efectos de los gases que la policía disparó contra los manifestantes por lo que fue trasladado de inmediato a Nairobi para someterse a tratamiento médico.
«Están obligando a Kizza Besigye a exiliarse. El vuelo ha despegado sin él. Tanto él como su mujer siguen en Nairobi», ha declarado en la mañana del miércoles Anne Mugisha, vice secretaria de relaciones exteriores del Fórum por el Cambio Democrático, coalición de organizaciones opositoras que lidera Besigye.
Según la oposición, Besigye tenía previsto convocar una «oración nacional» el jueves, el mismo día de la inauguración de Museveni, quien -consciente de los planes de su adversario- aseguró el martes que «solo Dios» podía impedir la toma de posesión «del presidente de Uganda que ha sido debidamente elegido».
Sin marcha atrás
Pese a la violencia, el régimen no parece dispuesto a dar marcha atrás y acaba de anunciar un endurecimiento de las penas impuestas contra personas que alienten «los disturbios y el sabotaje económico, violación, asesinato o traición». Según anunció el martes el presidente Museveni, los presuntos culpables de los mencionados delitos no podrán salir en libertad bajo fianza hasta la celebración del juicio, una medida que sin duda hubiera impedido la puesta en libertad de Besigye tras los reiterados arrestos que sufrió a lo largo de abril.
La prohibición de viajar a Besigye por parte del régimen llega un día antes de que Museveni asuma el cargo por cuarta vez tras ganar con una cómoda mayoría en primera vuelta las elecciones presidenciales de mediados de febrero con el 68% de los votos. Besigye, principal candidato que podía hacerle sombra a Museveni, se hizo tan solo apenas un tercio de los votos, lo cual desató las denuncias de fraude por parte de la oposición.
Desde entonces, las protestas contra el encarecimiento de la vida en el país de África oriental se han sucedido en los principales núcleos urbanos, dejando imágenes de disturbios sobre todo en Kampala. La organización Human Rights Watch ha acusado a las fuerzas del orden de haber disparado al menos contra nueve civiles no armados que se manifestaban pacíficamente».
http://www.elmundo.es/elmundo/2011/05/11/internacional/1305112693.html
En la fotografía que encabeza la noticia se ve a la policía practicando detenciones en Kampala.