Constantino Nguema Mansogo. AsodegueSegundaEtapa
¿Son realmente difíciles las matemáticas? La respuesta es no, pero ¿por qué tienen esta mala fama?
Por Constantino Nguema Mamsogo.
Matemático
Seis de cada diez jóvenes en edad escolar se han quedado con las matemáticas en la clausura de este año escolar en toda la república de Guinea Ecuatorial. Este dato de una encuesta que hice personalmente no es ajeno a gran parte del mundo en general, las matemáticas han sido siempre y desde antaño el talón de Aquiles de todos los estudiantes.
Generalmente las matemáticas se vienen considerando como una asignatura aburrida y difícil de superar. Las matemáticas en las aulas parecen más algo distante y poco aplicable. ¿Pero realmente lo son? o el Sistema educativo no ajusta las enseñanzas de las matemáticas para que sean más alcanzables y transmisibles para los estudiantes?
Para la gran mayoría de los mortales, escuchar hablar de matemáticas da miedo, mejor estar lejos de ellas que de cualquier otra asignatura, cuando en realidad no debería ser así, porque las matemáticas son esta disciplina científica que probablemente sea las más usada y visible en nuestro día a día. Los números están por todas partes, cuantificando y dando medidas exactas de instrucciones, objetos, fenómenos y espacios y tiempos. Todas las ciencias usan los conceptos matemáticos de un modo u otro, la economía, la arquitectura, en la medicina, por ejemplo, tomar dos compromisos de cualquier medicamento no es lo mismo que tomar cuatro, porque los medicamentos se deben tomar siempre en la dosis prescrita por el médico. Si a tu vieja madre le han recetado 30 tabletas al mes, para tomar una al día, pasados quince días desde la última vez que la visitaste y todavía quedan 30 tabletas; puedes hacer los cálculos y sabes que no los está tomando.
Incluso en oficios como la pintura y la escultura las matemáticas juegan un gran papel, relacionado con el color o las proporciones. Y en la música, las matemáticas son cruciales, todos los ritmos, compases y armonías se pueden ver reflejados matemáticamente.
Comprender los conceptos matemáticos, da las herramientas necesarias para analizar y comprender mejor el mundo, nos ofrecen el rigor y la lógica factores primordiales para tener una capacidad analítica y crítica afín de discernir mejor en lo esencial en la vida.
En mi opinión, hay muchos factores que contribuyen a que las matemáticas parezcan una asignatura difícil.
La fobia a las matemáticas puede ser un sentimiento de tensión, aprensión o miedo que interfiere con el rendimiento matemático. Un individuo con fobia a las matemáticas no carece necesariamente de habilidad en matemáticas; más bien, no puede rendir al máximo de su potencial por los síntomas de ansiedad que interfieren.
La fobia a las matemáticas, para algunos investigadores, se obtiene, no de la experiencia personal, sino de los padres y maestros. Cuando los padres con mucha ansiedad matemática tratan de ayudar a sus hijos con la tarea, transmiten sin querer la idea de que las matemáticas son difíciles y provocan ansiedad.
Los estudiantes a menudo desarrollan fobia a las matemáticas en las escuelas, como resultado de aprender de los maestros que también sufren de fobia a las matemáticas. Dichos maestros generalmente recurren a la enseñanza exclusivamente a través del libro de texto, confiando en la memorización de hechos y empleando solo ejercicios y prácticas para reforzar la lección.
Las investigaciones confirman que la presión de los exámenes y pruebas y el riesgo de vergüenza pública son las principales fuentes de tensión improductiva entre muchos estudiantes. La imposición de la autoridad, la difusión y los plazos de tiempo para culminar los exámenes, son prácticas que forman parte cotidiana en las matemáticas y que no ayudan necesariamente en la difusión y el aprendizaje de las matemáticas.
Las matemáticas normalmente se enseñan como una materia correcta o incorrecta. Los profesores esperan una respuesta fija de los alumnos y en ocasiones esta inflexibilidad es tan alta que a los alumnos no se les otorga la libertad de poder expresarse a su manera. Esto lleva a la memorización, como método de aprendizaje, que los psicólogos han demostrado que es obsoleto.
Remedios
Como es bien sabido que existe un triángulo -maestro-alumno-padre- para el éxito de la educación, el papel de cada uno es importante para erradicar la fobia a las matemáticas de los estudiantes.
¿Qué pueden hacer los profesores?
Un factor muy importante para motivar a los niños a estudiar matemáticas es que el maestro se mantenga positivo y entusiasta con las matemáticas.
En segundo lugar, el maestro no debe escribir la respuesta incorrecta. Porque en realidad ayudan a que nuestros cerebros crezcan.
Las pruebas son importantes, pero no deben ser el último objetivo. Los verdaderos objetivos de las matemáticas deben ser preparar a los estudiantes para enfrentar problemas de la vida real con las matemáticas como arma.
Los maestros no deben presentar las matemáticas como una materia difícil e imposible de aprender porque NO es eso.
Se debe mostrar a los niños que las matemáticas son una materia CREATIVA. Aprender matemáticas es más como aprender música o arte, es igual que aprender historia o biología. Los hechos básicos de las matemáticas nunca cambian, ¡PERO las formas en que resolvemos los problemas de matemáticas presentan toneladas de variabilidad!
Los estudiantes a menudo están mucho más motivados si se les dan problemas abiertos para resolver.
Los estudiantes están más motivados una vez que se dan cuenta de dónde se requieren todas las matemáticas. Por ejemplo, las matemáticas básicas como la estimación de precios al comprar, las fracciones en la cocina, los decimales en las transacciones financieras y las habilidades de medición en la costura o la carpintería son muy necesarias en la vida ordinaria. Por lo que la enseñanza de las matemáticas debe ir acompañada de experiencias de la vida cotidiana.
Por ejemplo, los estudiantes deben saber que el cálculo Integral se puede utilizar para medir longitudes, áreas, volúmenes, etc.
Mediante el estudio de funciones y, más concretamente, mediante el uso de la derivada podemos conocer:
- la variación del espacio en función del tiempo
- el crecimiento de la población de una zona en función del tiempo
- el desgaste de un neumático en función del tiempo
- el beneficio de una empresa en función del tiempo.
En economía por ejemplo el límite ayudaría a conocer el valor máximo o mínimo que puede adquirir el dinero en el mercado financiero en un determinado período. También los límites permiten hacer cálculos para conocer cuándo se agotará un recurso, como por ejemplo el petróleo, según la producción en un determinado período de tiempo.
Los estudiantes de cursos de ingeniería deben saber que la transformación de Laplace es usada para resolver ecuaciones diferenciales lineales con coeficientes constantes y condiciones iniciales. Los profesores deben enseñar al estudiante a hacer notas resumidas para prepararse para un examen. Muchos estudiantes no saben el poder que reside en hacer sus propias notas de resumen.
El Consejo Nacional de Profesores de Matemáticas de los Estados Unidos, sugiere que los maestros se adapten a los diferentes estilos de aprendizaje, creen una variedad de entornos de prueba, se abstengan de vincular la autoestima con el éxito en matemáticas, enfaticen la importancia del pensamiento original y de calidad en lugar de la manipulación rutinaria de fórmulas.
Los niños disfrutan experimentando
Para aprender matemáticas en profundidad, los estudiantes deben participar en la exploración, la conjetura y el pensamiento. Los estudios han demostrado que los estudiantes aprenden mejor cuando son aprendices activos que pasivos (Spikell, 1993). La teoría de las inteligencias múltiples aborda diferentes estilos de aprendizaje. Todo el mundo es capaz de aprender, pero esta capacidad depende de la variedad de formas en que se presentan las matemáticas, por ejemplo, a través de la actuación, grupos cooperativos, ayudas visuales, actividades prácticas y tecnología.
Los estudiantes deben hacer preguntas cuando no entiendan
Los conceptos matemáticos se construyen unos sobre otros y si uno se pierde al principio, será mucho más difícil entender los conceptos posteriores. Los estudiantes deben sentir que, si no entienden algo, es probable que haya al menos otra persona en la sala que también esté confundida.
En lugar de estudiar para un examen la noche anterior, deben reservar tiempo todos los días para estudiar y resolver problemas de práctica
La práctica repetida a largo plazo les ayudará a recordar cómo resolver las cosas cuando están estresados en el entorno de prueba. Estudiar temprano también da tiempo para concentrarse en los conceptos que son más difíciles de dominar. Cambiar la forma de estudiar matemáticas puede cambiar la actitud hacia ellas. Simplemente memorizar una fórmula no es tan efectivo como comprender lo que significa la fórmula y saber exactamente cuándo usarla.
Los estudiantes deben leer el libro de texto detenidamente y escribir preguntas para hacerlas en clase más tarde
Trabajar con un grupo de estudio a veces puede ayudar a comprender mejor el tema que hacerlo todo solo. El aprendizaje entre pares es más útil para los estudiantes, en particular para aquellos que sufren de fobia a las matemáticas. El método de estudio de revisión sistemática funciona bien en todos los estudiantes. Los mapas mentales y los mapas conceptuales ayudan en la rápida revisión y memorización.
¿Qué pueden hacer los estudiantes?
Lo primero que tienen que hacer los estudiantes es conocer los síntomas de la fobia a las matemáticas. Hay varios síntomas comunes de la fobia a las matemáticas: pánico, paranoia, comportamiento pasivo y falta de confianza. Una vez que un estudiante sabe que tiene fobia a las matemáticas, debe reconocerlo. Tener fobia a las matemáticas en sí mismo no hace que uno sea una mala persona, pero no lidiar con eso afectará negativamente la vida de uno.
Los estudiantes deben hacer preguntas cuando no entiendan. Los conceptos matemáticos se construyen unos sobre otros y si uno se pierde al principio, será mucho más difícil entender los conceptos posteriores. Los estudiantes deben sentir que, si no entienden algo, es probable que haya al menos otra persona con la misma dificultad.
¿Qué pueden hacer los padres?
Son muchos los estudios que demuestran la importancia de la participación de los padres en los procesos educativos de los niños. Entonces, una de las maneras más fáciles de reducir la fobia a las matemáticas es que los padres se involucren más en la educación de sus hijos. Además, la investigación ha demostrado que la percepción de las matemáticas por parte de los padres influye en la percepción y el rendimiento de sus hijos en matemáticas (Yee y Eccles, 1988).
Los padres tienen que prestar atención al comportamiento de los niños y ver si se molestan específicamente cuando tienen que hacer cuentas. El refuerzo positivo es una gran manera de ayudar a un niño a superar la fobia a las matemáticas. En lugar de ser negativos cuando se equivocan en algo, los padres deben discutir los problemas con ellos y enfatizar los aspectos en los que acertaron. Señale las habilidades que han dominado y manténgase positivo sobre las que aún necesitan algo de trabajo.
Se debe recordar a los niños que las habilidades matemáticas no se aprenden automáticamente y que todos aprenden a un ritmo diferente. Si bien es posible que no desee permitir distracciones visuales como la televisión o Internet, es posible que su hijo prefiera música de fondo o estudiar en el piso apoyado en almohadas en lugar de sentarse en un escritorio. Por lo tanto, se debe permitir que los niños adopten su propio camino después de una estrecha observación.
El estudio prolongado sin una oportunidad puede causar frustración. Es bastante natural que un niño se sienta frustrado cuando se le presenta una larga serie de problemas. Como adultos, nunca nos sentamos y tratamos de leer un libro completo de una vez, entonces, ¿por qué intentaríamos hacer eso con las matemáticas? Así que los descansos son esenciales.
Para ayudar a un niño que tiene dificultades con las matemáticas, los padres deben saber cómo se enseña en su salón de clases. Algunos padres entran en contacto regular con el maestro y discuten los problemas de sus hijos. Esos niños definitivamente lo hacen mejor.
Algunos niños pueden tener la tendencia de volver a casa y quejarse de que no son tan buenos en matemáticas como uno de sus compañeros de clase. Los padres deben desalentar este tipo de conversación y hacerles saber que simplemente aprenden a un ritmo diferente. Las matemáticas no son una competencia. Los padres deben evitar hacer declaraciones alrededor de sus hijos que puedan darles la impresión de que los están comparando con sus propios compañeros de clase o hermanos.
¿Cómo pueden los estudiantes superar su fobia a las matemáticas?
Deshazte del pensamiento erróneo
El primer paso es eliminar todas y cada una de las formas de pensamiento erróneo que los estudiantes han escuchado y a las que se han acostumbrado a lo largo del año. La mayoría de los estudiantes han escuchado constantemente de sus padres que las matemáticas son una materia difícil de aprender y que no se pueden entender fácilmente.
En primer lugar, limpia tu mente de pensamientos erróneos y abre tu corazón para aprender.
Los maestros pueden ayudar a los estudiantes asegurándoles que las matemáticas no son una materia difícil de dominar.
Construyendo Confianza
Cuando los estudiantes se desempeñan mal en las pruebas, tareas o exámenes, en lugar de criticarlos, los maestros deben decirles cosas amables para ayudarlos a desarrollar su confianza.
Esfuérzate siempre por evitar decir algo desagradable a tus alumnos, especialmente cuando no entiendan una pregunta; contribuirá en gran medida a ganar su confianza de que pueden hacerlo mejor la próxima vez.
Comience con lo básico
Algunos alumnos son incapaces de resolver problemas básicos, lo que les dificulta resolver los más difíciles. Como resultado, los profesores siempre deben intentar comenzar desde el principio con sus alumnos y brindarles oportunidades para que practiquen preguntas más simples, cuantas más, mejor.
Cuando hay demasiado conocimiento a la vez y no hay suficiente tiempo para practicar, incluso los mejores estudiantes de matemáticas pueden sentirse abrumados y agobiados. Es una excelente idea dividir el material en secciones más pequeñas para que los alumnos puedan dominar una etapa antes de pasar a la siguiente. Y finalmente, tampoco es imprescindible que todo el mundo entienda las matemáticas, hay muchas personas que alcanzaron el éxito en la vida sin dominarlas. Por lo tanto, es bastante infundado estar muy loco por el puntaje de matemáticas. Una actitud paciente, positiva y de apoyo hacia los niños puede resultar en la superación de la fobia a las matemáticas.